15 de enero de 2011

Palabrero Ayoíno (16)



Foto recogida en la web de Villabrázaro (Zamora)

Afinoyo: Hinojo (Foeniculum vulgare). Planta que crece en las cunetas, muy habitual en toda la cuenca del Mediterráneo. Tiene un ligero toque anisado y se usa mucho en la cocina, aunque en Ayoó tiene un uso más particular: En la celebración de fiestas importantes, como en bautizos, bodas o en San Bartolo, se engalanan las calles y se echan en el suelo plantas olorosas y flores, entre otras, el afinoyo, como aquí se llama, que le da un perfume singular al recorrido de la procesión.




En esta página del pueblo de Villabrázaro se puede ver, paso a paso, cómo es el proceso de recolectar el hinojo para usarlo como infusión.



Cardo borriquero: Los burros se comían con muchas ganas esta planta llena de pinchos.

Cardo borriquero fotografiado en Ayoó Pequeñino.


Escoba: Su nombre científico es Cytisus multiflorus (recogido del Estudio Etnobotánico del Municipio de Ayoó de Vidriales, de Yolanda Cano Lobato). Con esta planta se hacían escobas para la casa, para las cocinas de suelo empedrado, para las habitaciones. Se cogían los hilos de la planta y se hacían matojos que se unían.


Escobas fotografiadas en La Cuesta La Pedrera.
Felecho: Helecho. Como contaba en el artículo dedicado a los hornos de pan, en Ayoó había antaño muchos helechos y se usaban sus ramas para hacer una mundilla o escoba con la que barrer el horno antes de meter la masa del pan.


Helecho, foto tomada del blog Todoplantas.

Follaco: Ramas de roble cortadas en septiembre y octubre y que se le daban de comer al ganado, a ovejas y cabras, sobretodo cuando nevaba y no había hierba.

Roble en la cuesta de Requeijo.

Pan y queso: Flores que se recogían para decorar y porque daban buen olor.





Piñerina: Aira caryophyllea. La planta que se utilizaba para hacer escobas para encalar. También se usaba para barrer las paredes y limpiar las telarañas (Estudio Etnobotánico del Municipio de Ayoó de Vidriales, de Yolanda Cano Lobato).


Piñerina en Peñacabras

Randero: Nombre científico, Adenocarpus complicatus (recogido del Estudio Etnobotánico del Municipio de Ayoó de Vidriales, de Yolanda Cano Lobato). Planta con la que se hacían las escobas para barrer en la era o en las calles.


Randero fotografiado en Ayoó Pequeñino.



Tomillo: (Thymus vulgaris) Una de las plantas más conocidas, se usa tanto por usos medicinales como para la cocina (combina especialmente bien con el conejo) o para la casa (como aromatizante). En el Estudio Etnobotánico del Municipio de Ayoó de Vidriales, de Yolanda Cano Lobato, se recogen diferentes usos de esta planta: como ahuyentapolillas; junto a la lavanda y el cantueso, se cocía y se usaba el agua para “el mal rojo de los cerdos”*; se recogía tomillo por San Juan, se secaba y en el invierno se echaba en el fuego (con llama, si son brasas solas hace humo) y se aromatizaban así las camisas de lino que se usaban antaño.

Tomillo en La Cuesta de La Pedrera.

Tomillo de monte y tomillo de campo: Mi madre me identificó estas dos plantas durante un paseo por el campo. Dice que son como tomillo pero más basto y con la flor amarilla. Con el tomillo de campo se hacían escobas para barrer en la era. Se cogía, se aplastaba con piedras y servía para barrer cosas delicadas, como el muelo en la era, por ejemplo.

Tomillo de monte en La Cuesta de La Pedrera.




Tomillo de monte en La Cuesta de La Pedrera.


Detalle de la flor del tomillo de campo.


Artículo realizado gracias a mi mami, que es la que sabe de plantas y me las va presentando en nuestros paseos por el pueblo.


* El mal rojo de los cerdos:

El mal rojo es una de las enfermedades clásicas del cerdo ("enfermedades rojas porcinas") y está producida por Erysipelothrix rhusiopatiae. En el cerdo desencadena cuadros septicémicos, cutáneos y crónicos, asentados estos últimos en articulaciones y válvulas cardíacas. El agente persiste de forma latente incluso en los animales vacunados y aprovecha situaciones de baja inmunitaria para diseminarse en la explotación y originar casos aislados o brotes de escasa prevalencia. Cuando los factores inmunosupresores actúan en masa y coaligados la enfermedad puede ser motivo de pérdidas significantes.



No es un proceso infeccioso exclusivo de la especie porcina, sino que también puede afectar con artritis agudas en rumiantes jóvenes, procesos septicémicos en pavos y cutáneos en el hombre, aunque con menos gravedad y prevalencia. El mal rojo es una zoonosis típicamente ocupacional. El hombre se infecta por contacto con animales o sus productos, y la infección no suele traspasar el ámbito cutáneo; rara vez ocurren septicemias, pero se vienen describiendo con relativa asiduidad endocarditis (León y Cubero, 2000).

(...)
Robert Koch (1878) registró, por vez primera, un estado septicémico en ratones (Bacterium murisepticum) pero sin asociarlo etiológicamente con el mal rojo porcino. La similitud de ambos agentes la estableció en el año 1882, Pasteur y Thuillier que publicaron una descripción microbiológica del agente causal, y elaboraron una vacuna, la primera, atenuada lapinizada contra el mal rojo. Más tarde, Rosenbach (1887) aisló el agente causal de la erisipela humana, pero sin asociarlo con los bacilos descritos por Koch y Pasteur. No fue hasta 1943 cuando Kelser aunó (E. rhusiopathiae) las tres especies (porcino, muriseptico y erisipeloide humano). En 1952 se cambió el nombre del germen a E. insidiosa, pero en 1974 fue aceptada de nuevo la denominación (E. rhusiopathiae) original.


Documento de la Universidad de Córdoba.


Y aquí se explica más de la presencia de la enfermedad. Es una hoja informativa repartida a las ganaderos nada menos que de 1948, del Ministerio de Agricultura:


Este peligro aumenta por el hecho de ser el mal rojo enfermedad fácilmente transmisible al hombre, el que puede adquirirla bien por contagio externo, al mancharse las pequeñas heridas de las manos con el manejo de productos de cerdo muerto, que es el caso más frecuente, bien por medio de ingestión de carnes no esterilizadas, de la misma procedencia.


Son varias las formas que suele presentar, unas de tipo agudo, o sea de evolución rápida, y otras llamadas crónicas, de desarrollo más lento y generalmente más benigno.
La forma aguda va precedida de un período de seis a siete días sin alteración alguna, que transcurre desde el momento de la contaminación o contagio hasta la aparición de los primeros trastornos que, presididos por la fiebre, se caracterizan por intensa postración, tristeza, inapetencia y, a veces, vómitos. Hay abundante lagrimeo, con enrojecimiento de la conjuntiva. En la piel aparecen, a partir del segundo o tercer día, manchas rojo-violáceas, grandes, localizadas preferentemente en la cara inferior del vientre, bragadas, axilas, cuello y orejas; tienen un tamaño variable, pero siempre mayor que las que se presentan en la peste y distintas de éstas, por tener forma más o menos rectangular, que recuerda la de un ladrillo. En algunos casos la enfermedad se detiene aquí; a los ocho o diez días los síntomas empiezan a decrecer, se recobra el apetito y se restablece 1a normalidad; afortunadamente esta evolución benigna es muy frecuente en España. Otras veces, por el contrario, tiene un desarrollo tan rápido que el enfermo muere en pocas horas, sin que haya tiempo ni aun de presentarse las manchas características, denominándose a esta forma atípica Mal rojo blanco, en razón a la ausencia de enrojecimiento.



5 comentarios:

sonia dijo...

Me he quedado con una curiosidad:¿qué es el" mal rojo " de los cerdos?
Estupendo post,caray lo que se aprende.

IRM dijo...

Gracias por la pregunta, Sonia, que me había quedado en el tintero explicar que era esta enfermedad de los "cochos".Ya está puesto.
Un saludo!!!!

Pepe dijo...

Hola, buenas tardes: Echo en falta la palabra " fuyaco ". Quizá esté, pero yo no la he encontrado. Fuyaco se dice de las ramas de los robles cortadas con hojas, todavía verdes , y que se destinaban para alimento de ovejas y cabras en el invierno. Lógicamente, una vez comidas las hojas servían para la lumbre.

Pepe dijo...

Perdona,una vez más. Por si te sirve de algo, cuando haceis la definición de la palabra "SOBEO" creo que os referís a una tira larga de cuero doblado que sirve para unir el "JUBO" , sic, a la manjera del carro. Hay otras tiras de cuero llamadas "cornales" que uncían los cuernos de las reses al "Jubo" por encima de las melenas.

IRM dijo...

Hola Pepe. Follaco o fuyaco si está puesto,con la primera grafía (nunca sé estas palabras cómo escribirlas), busca que está!

Sobeo también está, como dices, era una tira de cuero con la que se unía el yugo, la encuentras aquí, en el Diccionario de Benavente y Los valles (4) http://elblogdeayoo.blogspot.com.es/2009/12/diccionario-de-benavente-y-los-valles-y.html

Gracias por participar y anímate a mandarnos y/o corregir más palabras, que entre más esto es más fácil!!!!