En las paredes de la ermita de San Mamés, como ocurre en otros muchos santuarios similares, encontramos ofrendas de diverso tipo: partes del cuerpo humano hechas en cera, trenzas de cabello natural, cuadros explicativos e incluso mortajas. Son los llamados también exvotos (del latín ex voto, por voto), es decir objetos que se ofrecen en este caso a San Mamés, como agradecimiento por haber intercedido en un problema, normalmente de salud.
Los exvotos han existido en todas las culturas y desde tiempo antiguo ya que se cree que esta forma de agradecimiento se originó en la civilización egipcia y mesopotámica. Más tarde esta costumbre fue adoptada en el mundo católico. Su origen se situa en Italia, sobre el siglo XV, cuando las personas de posibles contrataban artistas para que crearan pinturas en las que ellos eran representados como el objeto del milagro de la sanación (lo que venía a ser salir en la portada del Hola de aquel entonces...).
De Italia se expandió el uso de estas ofrendas a toda Europa y llegó, con la conquista de América, al nuevo mundo. El país que mejor ha recogido esta tradición ha sido México, donde aún hoy es una costumbre muy extendida. La artista mexicana Frida Khalo y su pareja, Diego Rivera, tenían una gran colección de cuadros de exvotos y ella mismo realizó alguna de sus obras en este estilo.
Más información sobre los exvotos:
- Patrimonio Popular
- Fundación Joaquín Díaz (página 10)
- Catálogo de la exposición de Exvotos (1998) en el Museo Etnográfico de Castilla y León
- Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos
- Wikipedia
- Diccionario de Mitos y Leyendas
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