Foto de la web El Coleccionista |
Abuelo y el Ti Zacarías encargaron un gorrifo en Santibáñez y dejaron una señal de 50 pesetas. Cuando fueron a recoger el gorrifo, al pagar, no les descontaron la señal y ellos no se dieron cuenta hasta más tarde. Volvieron, se lo dijeron al vendedor pero éste no lo quería reconocer, cosa que hizo que mi abuelo se enfadara mucho y ya sabemos cómo era Teófilo cuando se enfadaba (y cuando no, jeje): empezó a largar todos los juramentos que se le venían a la cabeza, mecaguental, mecaguen lo otro... casi hasta llegar a las manos. Resultado: vino la guardia y al final, mi abuelo se salí con la suya y cobró la señal, pero cargó con una multa de 50 pesetas (lo mismo que el dinero en disputa de la señal que había dado) por escándalo público y blasfemia.
2 comentarios:
¿Blasfemia el ti Teófilo?, no me lo puedo de creer, con lo pausado y bien hablado que fue siempre.
Un saludo
Buena historia, a mi padre le puso el cura cinco pesetas de multa por dar un beso a mi madre en vísperas de la boda
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