Requeijo beach hace unos añitos, en 2002. |
Cartel indicador en el camino, señalando el lugar, playa. |
Uno de los lugares que más visito en verano en Ayoó es la playa de Requeijo, el lugar de baño de nuestra presa. Me encanta llegar sofocada por la carrera en bici hasta allí y meterme en el agua fresca... es uno de mis sitios favoritos, un lugar con muchas posibilidades pero que se está quedando algo abandonado por autoridades y público.
Cae la tarde. Requeijo, verano del 2007. |
No va tanta gente como podría, que mira que se está bien y es entretenido para los niños... aunque tiene sus incomodidades. Llegar hasta allí a pleno sol es la primera. Yo opto por la bici, a veces dando un paseo a pie y en muy contadas veces, me he acercado en coche.
Requeijo, como indica la foto, en julio de 2007. |
Una vez allí, hay que luchar contra los tábanos, ¡anda que no son pesados estos bichos!... por no hablar de las moscas y alguna que otra avispa, sobretodo cuando se saca la merienda... En el agua, ranas, peces y de vez en cuando, asoma alguna serpientilla acuática....
Primer baño de nuestra temporada, verano del 2014. |
La zona de baño ha pasado por varias etapas. En un primer momento se le echó arena, arena de obra, bastante molesta al final porque es gorda y pegajosa... aunque bueno, a los niños les gustaba (al menos al mío, cuando empezó a ir allí).
Verano del 2007, la playa llena de arena. |
Ya en el agua, las plantas acuáticas comienzan a ser un serio problema y molestia para los nadadores y no estaría mal que se hicera algo por sacarlas, por limpiar el cauce de la presa.
La zona de la playa se acondicionó levantando un murete de separación con las tierras de atrás, se instalaron bancos, que están ya en muy mal estado debido al tiempo y al escaso mantenimiento, una ducha muy básica pero que hace su papel y un pequeño tenderete cubierto para dar sombra que está en franco estado de ruina.
Verano, 2008. |
Verano, 2008. |
Así estaba este verano la sombra en la playa, con el cañizo completamente destrozado. |
La cubierta apenas existe, está hecha trizas y los alambres de enganche, han caído a los lados con un gran peligro para todos los que buscamos un poquito de sombra cuando estamos allí.
También las papeleras están destrozadas y, la verdad, para no ser recogidas nunca, mejor quitarlas y concienciar a los visitantes para que se lleven su basura y que no la dejen allí, donde nunca será limpiada.
Los árboles que se han plantado en la zona para dar sombra, no tiran.... se han secado un par de chopos, de hecho alguno de ellos ya ha sido arrancado. Es difícil encontrar alguno que se desarrolle en ese lugar, tal vez por el tipo de tierra, por paradójica falta de agua o por exceso... no lo sé.
Verano 2014. |
Y la última queja sería la de la zona de aparcamiento. Hay unos pivotes que tratan de impedir que se metan coches en la campa que hay en la zona de playa, pero se han ido cayendo o, directamente, los han tirado para entrar, sin ningún tipo de miramiento, con los coches hasta casi la línea de agua. Algunos de los irreductibles de la zona hemos llegado a acarrerar piedras para poner un poco de dificultad a ese comportamiento, pero lo cierto es que he visto meter autos o pequeñas caravanas hasta los bancos.
Verano de 2010. |
Al final me ha salido un artículo de quejas, casi debería sacar de paseo mis famosos tabanitos, aquellos que usaba para dar picotazos con mis quejas...
Lo cierto es que a pesar de todo esto, es un lugar que me encanta, donde he echado muchas horas, muchas risas, muchas conversaciones, un momento para hablar con la chavalería, para relajarse, leer un rato, ver cielos maravillosos, bañarse en un agua de verdad, hacer un gratuito tratamiento de pelo con barro....
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1 comentario:
Habría que acordarse de la presa de Congosta más a menudo, que ni alumbrado, ni asfaltada...
Saludos
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